En esta actividad se nos planteaba un ejercicio muy particular, concretamente era dibujar nuestra mano sin mirar lo que estamos dibujando y sin perder de vista la mano que dibujaríamos, concentrándonos en los detalles de esta como por ejemplo las líneas, contornos y otros. Teniendo como objetivo pasar a la modalidad D e ignorara la I.
Yo realizando este ejercicio me sentía como ciego y además de la constante ansiedad de no poder mirar lo que estaba haciendo, de igual forma pienso que se logro un resultado peculiar que es bonito a su manera, como Betty Edwards planteaba "vera que esas marcas poseen una extraña belleza, evidentemente no representa la mano, solo sus detalles y los detalles de los detalles".

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